La liga de Cadete Preferente de Tenerife decidía ayer su campeón. Aunque no de manera matemática, se enfrentaban los dos primeros clasificados con seis puntos de diferencia. El CD Sobradillo marcha líder por delante del CD Tenerife y este miércoles visitaba la Ciudad Deportiva Javier Pérez con el firme objetivo de sentenciar el campeonato y mantener su imbatibilidad.
El partido fue digno de lo que se podía esperar de los dos mejores equipos cadetes de Tenerife. El Sobradillo mandaba al descanso con un gol de Héctor y aumentó su ventaja en el arranque de la segunda mitad con un penalti transformado por Dani. El Tenerife era el que más necesitaba la victoria y se fue a por ella, logrando recortar diferencias con un gol de Diego. Pero rebasado el ecuador del segundo periodo todo se vino abajo. Ultras del CD Tenerife, que asistieron a estadio a animar a la vela chica del club, encendieron bengalas y la intensa humareda obligó a suspender momentáneamente el partido. En el mismo estadio y en redes sociales aficionados y padres de los menores que jugaban han alzado la voz para denunciar a los ultras y al CD Tenerife que no pone fin a estos hechos. Ya la pasada temporada ocurrió algo parecido en un partido de categoría Infantil y ni el club ni la Federación impusieron sanción alguna. Esa impunidad ha provocado que ayer se volviera a repetir. En lo deportivo, el choque se reanudó pero quizás esa interrupción sacó a los jugadores del partido y el marcador no se movió. Los puntos se los quedó el CD Sobradillo que está a un paso de hacer historia y conquistar el título de la Cadete Preferente tinerfeña.
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