Menos sanciones y más educación

En cada temporada deportiva hay muchos jugadores que son sancionados debido a mal comportamiento o comportamiento violento. Sobre todo en el fútbol tenemos muy ‘’aceptado» el hecho de que todas las semanas hayan comportamientos violentos tanto en la grada como en el campo y no se hace un análisis profundo del porqué. 

<>Quizás tratar de averiguar el por qué suceden estos comportamientos  requeriría de un análisis muy largo, pero sí que podemos hacer un análisis rápido de lo que no está funcionando para arreglarlo. En este artículo en concreto quiero hablar de los ‘’castigos ejemplares».

<> <>En los últimos años estos castigos son los que parecer estar de moda. Si tu afición tira objetos al campo, te cerramos el campo; si tu jugador se pelea, lo expulsamos diez partidos, si los padres de tu equipo benjamín insultan, el árbitro da por finalizado el partido; etc… Estos son los castigos que más se aplican y parecen ser muy aplaudidos por el público del fútbol por lo que las diferentes federaciones se colocan la medalla del ‘’trabajo bien hecho» y a otra cosa.

<> <>¿Qué es lo que suele pasar con los equipos, jugadores y aficionados que reciben esas sanciones? Pues que al mes siguiente de acabar la sanción se vuelven a repetir esas conductas de violencia. Entonces la pregunta es, ¿por qué aplaudimos sanciones que no son nada efectivas? Castigar comportamientos violentos con este tipo de sanciones no es nada efectivo ya que jornada tras jornada seguimos viendo infinidad de comportamientos violentos en los terrenos deportivos. Cualquier psicólogo podría explicarle esto a las distintas federaciones deportivas pero como el castigo es lo más cómodo y las federaciones deportivas tienden al inmovilismo será difícil hacerles cambiar de idea.

<> <>Viendo que el problema de la violencia sigue presente ¿qué es lo que hacen las federaciones? Si el mismo jugador vuelve a ser violento pues en vez de diez partidos le metemos dos años, si tu afición vuelve a lanzar objetos te cerramos el campo cinco partidos y si tus padres siguen insultando en la grada te expulsamos de la competición…

<> <>Las diferentes federaciones deportivas deben de dar ya de verdad un paso adelante para atajar este problema y la única forma de acabar con el problema es la educación. Invertir en psicólogos deportivos que ayuden a educar a las familias en la grada, a diseñar planes efectivos de juego limpio en el deporte, dotar de más horas a la parte psicológica de los cursos de entrenadores, que estos cursos estén impartidos por psicólogos con experiencia práctica y contar con un psicólogo deportivo en la federación que atienda a los jugadores que son expulsados por problemas de violencia.

<> <>Por estas ideas no nos llevaremos tantos aplausos de los aficionados del fútbol pero sin duda son las que ayudaran a acabaran con el problema de la violencia en el deporte.

Escrito por Javier Elá Hernández (Psicólogo Deportivo)

Twitter: @JavierEla