El mundo deportivo en la isla de Tenerife esperaba impaciente el comunicado del gobierno canario para ver si se podría retomar la actividad, paralizada desde unos días antes del comienzo de las fechas navideñas.
Pero las noticias no han sido buenas, ya que esta situación se ha alargado por dos semanas más, revisable dentro de siete días.
A partir de conocerse esas medidas las voces de malestar y protesta, tanto individual como colectivamente, empezaron a manifestarse por los diferentes canales de comunicación existentes en la actualidad.
- Uno de los argumentos, por no decir el principal, es el agravio comparativo con otros lugares ya no solo del archipiélago sino también de tierras peninsulares, en los que con condiciones semejantes en la pandemia pueden seguir desarrollando los quehaceres en el mundo del deporte.
- A ello se le añade que tirando de números, el porcentaje de contagios en este ámbito social es muy escaso, en comparación con otros de la sociedad en los que no se han tomado decisiones restrictivas al respecto.
Deportes de equipo, centros de entrenamiento, gimnasios… llevan desde hace días alzando la voz para que se modifique esta situación y se pueda practicar deporte, algo que en muchos casos se realiza al aire libre por lo que el riesgo disminuye considerablemente.
Además cuando sea en espacios interiores y manteniendo los protocolos sanitarios, las posibilidades de verse afectados también decrecen, para ello desde los clubes, entidades y empresas, se han tomado todas las precauciones y medidas posibles.
En la isla de La Palma ya la vuelta del fútbol a los terrenos de juego tiene una fecha prevista, fin de semana del 15 al 17 del presente mes de enero. Una vez controlados los brotes que surgieron, todos ellos llegados desde fuera del territorio palmero. Hasta ese momento pocos habían sido los casos, lo mismo que en Tenerife y en cualquiera de las otras islas.
El malestar se ha disparado:
El malestar se ha disparado con la visión de esta reciente eliminatoria de copa del rey disputada en estos tres últimos días y que dejó a la vista como en los terrenos de juego se apreciaba la presencia de público y en lugares en los que el número de contagios no varía mucho del existente en Tenerife.
De ahí vienen la preguntas;
- ¿Por qué en esos lugares sí y en Tenerife no?
- ¿Por qué el deporte es uno de los perjudicados en la situación social en la que vivimos, cuando los hechos demuestran que no es el culpable de todo lo que está ocurriendo?
Mucha gente espera soluciones, respuestas y explicaciones, ya que el futuro de muchas personas depende de ello, ya de por sí muy dañadas desde el comienzo de esta pandemia.
Pedro Pérez Camacho,
ElDeportivo.es