La UD Güímar ganó su partido pendiente frente al Guargacho y consiguió el objetivo de mantener la categoría dos jornadas antes de que termine la temporada.
El partido se reanudó de forma inusual, pues el Güímar comenzó tirando el famoso penalti que supuso la suspensión del encuentro hace unas semanas. Eso prácticamente fue todo. El equipo güimarero marcó el penalti, se puso por delante 2-1 y no ocurrió nada más durante todo el partido. Como jugada destacable, un tiro al poste derecho del portero visitante al lanzamiento de una falta bien entrada la segunda parte.
Juego nefasto y calamitoso el que ofreció la UD Güímar a sus aficionados a pesar de jugar con dos jugadores más durante los 57 minutos que restaban, pero parecía que el equipo del Guarguacho tenía su once completo.
Lo mejor del partido el resultado que sirve para asegurar matemáticamente la categoría. Por lo demás, un partido para olvidar.