La mayoría de los aficionados al fútbol de Güímar no podrán ver el partido de eliminatoria de Copa Heliodoro que su equipo representativo tiene que jugar el miércoles 30 de octubre frente al Tenerife B, ya que tendrán que desplazarse hasta Candelaria, que será donde finalmente se juegue el encuentro.
El motivo del traslado del choque de Copa hasta el municipio vecino es de sobra conocido, el mal estado del alumbrado del campo Tasagaya y que tantos problemas ha acarreado al equipo güimarero en los dos últimos años.
Durante este periodo de tiempo, el representativo de la ciudad ha tenido que jugar sus partidos en horario diurno y realizar los entrenamientos de cada semana no a media, sino a un cuarto de luz.
Esta deficiencia en el alumbrado del campo ha contribuido a que los dos últimos años se produjeran una serie de inconvenientes que han afectado el buen nombre del equipo, de la ciudad y del deporte en el municipio. El primero de ellos ocurrió en un partido de liga de hace tres temporadas cuando se tuvo que suspender el encuentro que el AU Güímar tenía que disputar con el Guargacho un viernes noche y jugarse el domingo siguiente.
El segundo ocurrió durante el partido de las eliminatorias de ascenso a Preferente de la temporada 2011-12 contra el Buzanada y cuya segunda mitad tuvo que disputarse en el campo de Blas Reyes de Arafo. El tercero y el cuarto ocurrieron durante la disputa del Torneo Pepe Ramos del 2012 y 2013, cuando hubo que suspender algún partido y decidirse en una tanda de penaltis porque era imposible disputar los partidos con tan poca luz.
Ahora debemos añadir otro nuevo inconveniente a esta ya larga lista y es el traslado de este partido de Copa a Candelaria porque a las nueve de la noche no se puede disputar un partido de fútbol en Tasagaya y mucho menos de la envergadura del que nos atañe.
Indudablemente esto provoca que la previsible buena asistencia de aficionados güimareros que iban a presenciar el partido, no hay que olvidar que el equipo que visitaría Tasagaya es un Tercera División, disminuya y se vea mermada la taquilla al tener que desplazarse a otro municipio a más de 5 kilómetros de distancia. Esto no supondría ningún inconveniente para todas aquellas personas que dispongan de un medio de transporte a su alcance pero sí para la gran cantidad de jóvenes que podrían haber llenado y darle colorido a las gradas del Tasagaya y apoyar a su equipo.
Aunque hace ya dos años de los problemas eléctricos en el alumbrado del campo, no se ha obtenido ya no sólo una solución desde el ayuntamiento de Güímar sino que ni siquiera se ha emitido un comunicado explicando los motivos por los que el recinto deportivo está en esta situación. A pesar de habérselo pedido de esta página web en varias ocasiones, a día de hoy se seguimos sin obtener ninguna respuesta y lo que es peor, los deportistas y aficionados al fútbol en el municipio siguen padeciendo estos problemas, a la vez que el nombre del Tasagaya, histórico recinto deportivo de Canarias, se sigue arrastrando por los suelos.