Recuerdos del comienzo del Grupo Canario

Foto de Jose Manuel en un banquillo.
José Manuel Gil, míster realejero. Foto de Pedro Pérez Camacho.

Hoy se cumplen cuarenta años del comienzo del grupo canario, el doce de la tercera división, lugar en el que fútbol de las islas unió en su origen allá por la temporada 80-81 a equipos de cuatro de ellas, aunque en sus comienzos arrancó con muchas dudas, sobretodo en cuanto a su viabilidad económica.

El punto de partida se materializó con dos históricos canarios.

Un Tenisca-Lanzarote dirigido por Andrés Ledesma, el sábado 6 de septiembre de 1980, a las 17 horas, en el ya desaparecido Bajamar y que concluyó con empate a cero. Ese fue el primer partido de esa novedosa competición que agrupaba a los diecisiete mejores de las dos preferentes, nueve de Las Palmas y ocho de Tenerife, más otros tres, todos tinerfeños, que compitieron con equipos de la península la campaña anterior en una tercera que era de ocho grupos, estando encuadrados en el quinto. San Andrés, Tenisca y Toscal, fueron esos participantes que tuvieron que enfrentarse a rivales madrileños, extremeños y de las dos Castillas.

Cuarenta años más tarde, los tenisquistas siguen siendo los únicos que han disputado todas y cada una de las campañas del grupo canario, constituyendo un récord a nivel nacional.

Esta es la ficha técnica:

La que aparecía en el Diario de Avisos del día posterior al encuentro entre el Tenisca y el Lanzarote, el primero que se jugó cronológicamente hablando y firmada por Juan Francisco Pérez.

Tres cuartos de entrada en el «Bajamar». Tarjetas amarillas para Toñin, local, y para el visitante Felipe.

TENISCA: López; Toñín, Santiago, Servando, Aroldo; Hormiga, Felín, Carlos Matos; Leo, Jorge y José Adelto. En la segunda parte, Blas Ramón por Carlos Matos.

LANZAROTE: Rafael; Felipe, Cruz, Guelo, Cáceres; Arrocha, Grimón, Gil; Palero, Andrés y Pablo. En el 70′, Semi sustituyó a Grimón, y en el 89′, Tero por Pablo. ARBITRO Andrés Ledesma, del Colegio Tinerfeño. Aunque técnicamente estuvo bien, abusó del pito y destrozó la lucidez del juego.

GOLES: No hubo.

A ese mismo también día se adelantó otro de los partidos de esa primera jornada, el Tenerife Aficionado-Racing, que se jugó dos horas y media más tarde en el Heliodoro Rodríguez López.

A este se tuvo que esperar para ver el primer gol de esta nueva competición.

  • El grancanario Lorenzo, en el 16’, adelantó a los suyos tras recoger un rechace del larguero, algo que a la postre le sirvió de poco ya que perdieron por tres a uno, pero para la historia quedará como el primer goleador del grupo canario.

El primer campeón fue otro de los clubes con más solera del archipiélago, la UD Realejos.

Cimentado en que no perdió el primer lugar en las últimas once fechas, además de ser casi inexpugnable en su terreno de juego, solo el San Andrés y el Puerto Cruz, pudieron sacar un empate. De la mano de José Manuel Gil, míster realejero en ese momento, confirmaron el título con su triunfo en la antepenúltima jornada ante el Real Unión por 5-3, en Los Príncipes. Aunque luego no pudieron rematar esa gran temporada en la promoción de ascenso a segunda b, los gallegos del Arosa en el primer cruce les cerraron las puertas para subir.

Lo mismo le ocurrió al segundo clasificado, Telde, al que el Antequerano le quebró el cumplir el sueño, después de haber eliminado al Sevilla Atlético en primera ronda.

En el capítulo negativo están los descensos de; Santa Brígida, Unión Chile y San Antonio, los tres de Gran Canaria. La mala racha que acumuló el último clasificado final, San Antonio, una vuelta completa sin ganar, ya que entre los dos que le ganó al Real Unión, en casa y fuera, no pudo sumar ningún otro, es algo también de resaltar.

Dio para mucho en cuanto a anécdotas esta tercera división y aquí va una buena muestra de ellas:

En la jornada 36 en un Artesano-Unión Moral, Juani marcó los cinco goles locales, cuatro de ellos en la media hora final, su olfato goleador le llevó a estar compitiendo hasta el final por el pichichi con Lalo del Marino, que fue el que lo logró. El encuentro en el que el encargado del marcador tuvo más trabajo fue el Unión Chile-Tenisca, de la 31, hasta doce en total para concluir con el triunfo de los grancanarios por 8-4. No muy lejos se quedó un; Santa Brígida 8 Marino 1, de la séptima. Otra circunstancia llamativa ocurrió en la 25, en un Tenisca-San Antonio. La lesión del guardameta visitante, Santos, con los cambios hechos, obligó a este a situarse de delantero y ocupar su puesto bajo palos su compañero Benito, cuando transcurría el 69’.

Un mal hábito predominó en bastantes momentos de la campaña, las agresiones o intentos a los colegiados, por parte de aficionados, jugadores y entrenadores.

Por fortuna casi nunca llegaron a cumplir sus objetivos, aunque en algunas ocasiones las fuerzas de orden público tuvieron que intervenir porra en mano para aplacar las iras.

Por el contrario otro acontecimiento que debería ser más habitual y no lo era, ocurrió en un Lanzarote-Unión Chile de la jornada sexta. Cordero Vega salió aplaudido por la afición local y los dos contendientes. Lanzarote era un lugar en el que valoraban mucho el desempeño de los colegiados y la deportividad.
Cabrera de Saa, también recibió los aplausos del respetable, lo mismo que el conjunto foráneo en un Lanzarote-Tenerife Aficionado de la penúltima fecha.

La humanidad del colectivo arbitral vino reflejada por el trencilla, Álvarez Guerra, en un Racing-Marino en el que una mala interpretación del juego cortó una ley de la ventaja a favor local, lo que provocó que se llevara las manos a la cabeza consciente de su error y pidiera perdón, gesto que fue premiado por el público y los jugadores con una ovación.

Ya fuera de los límites del terreno de juego también ocurrían hechos llamativos.

En un San Andrés-Marino, de la jornada 31, un altercado en la puerta de entrada al campo de Las Teresitas llamó la atención de todos. Varios hombres de nacionalidad coreana intentaron entrar sin pagar, produciéndose un altercado con intervención policial que también fue agredida por algunos de ellos y que tuvo como consecuencia que acabaran en comisaría.

Otro de los hechos que captaron la atención, fue la ingenuidad de un niño de cuatro años que obligó a parar el Racing-Tenerife B, al ver el balón no se le ocurrió otra idea que saltar al campo para jugar con el ante la sorpresa de todos, teniendo que pararse el partido.

Al ser islas los continuos viajes entre ellas provocaron numerosos hechos fuera de lo normal, por la premura de tiempo o por otras circunstancias.

Una de las más destacadas le ocurrió a los grancanarios del Racing en la primera fecha de competición, al perder el vuelo y tener que ir a prisa y corriendo al puerto de la capital para subirse al jet foil, Princesa Voladora, llegando con poco menos de media hora de antelación al inicio en el Heliodoro Rodríguez López. Así por ejemplo un Estrella-Racing comenzó tarde por problemas en el desplazamiento de los grancanarios, haciendo acto de presencia solo cinco minutos antes del inicio, esa era otra constante en las jornadas con los viajes por medio.

Lo mismo ocurrió en un Güímar-Unión Moral, en el que además los visitantes se negaron a pagar su parte correspondiente por el arbitraje. Un error en la fecha de la emisión de los pasajes obligó al aplazamiento del Tenisca-Real Unión, al equivocarse de día la agencia de viajes.

Rizando el rizo en cuanto a hechos extraños nos vamos al capítulo de los autogoles y los que se marcan en la del rival.

Por dos veces Melgar, jugador del Estrella lagunero, repitió en partidos anotar en propia y en la puerta contraria, un hecho muy poco habitual, jornadas 1 y 37. Pero sin duda el premio a la rapidez para hacerlo se lo llevó el tenisquista, Nene, en apenas un minuto marcó en contra y a favor, justo al inicio del segundo periodo, en un Realejos-Tenisca de la undécima y con finalizó con triunfo realejero, por tres goles a uno.

Precocidad y olfato goleador fue el que demostró Sito. El joven conejero de apenas quince años anotó dos tantos en apenas 33 minutos, en el Lanzarote-Real Unión de la jornada 26 y que terminó con un 4-0 favorable a los locales, en el tercer encuentro que disputaba con los rojillos.

Mucho tiempo después esta competición sigue levantando muchas pasiones en las islas.

Dejando recuerdos y anécdotas que permanecerán en la memoria del colectivo, en una categoría que a pesar de los obstáculos y condicionantes que se va encontrando, siempre sigue saliendo airosa de todos ellos.

Pedro Pérez Camacho, 
ElDeportivo.es