"Querido diario, con toda la alegría del mundo vengo a relatarte todas las cosas positivas que he encontrado en mi entorno en estos últimos días. Quiero empezar diciéndote que ya mis sentimientos hacia el fútbol han cambiado y para mejor.
Esto viene propiciado porque, por lo que antes sufría, ahora lo han conseguido cambiar y todo lo que me rodea no son sino cosas positivas. Uno de esos aspectos positivos, son los entrenamientos. Antes el entrenador nos mandaba a dar vueltas al campo y nos pasábamos la mayoría de la práctica deportiva corriendo, en vez de estar con el balón. Ahora, el entrenador se preocupa que en todos los ejercicios haya balón. Aparte, al principio y al final de cada entreno, nos reúne y hace que hablemos uno por uno sobre el mismo, sobre el partido de la semana pasada o el que tenemos próximamente.
En esas charlas todos damos nuestro punto de vista. Otro aspecto positivo es que él, ha pasado de gritarnos cuando hacemos algo mal a decirnos que nos hemos equivocado de buena manera, seguido de una explicación verbal y visual de cómo se debe hacer bien. Nuestro míster siempre nos explica para qué hacemos un tipo de entrenamiento y para qué nos va a servir. Aprendemos mucho con él y todos nos sentimos participes. ¡No hay buenos ni malos!"
"Por último, algo positivo ha sido el entorno. Los directivos del equipo, ganemos o perdamos siempre están con nosotros apoyándonos. Al finalizar los partidos nos dedican palabras de ánimo, apoyo o, simplemente, se preocupan por nosotros. Esa presión que ejercían sobre nosotros al querer que ganásemos siempre ya no existe, con lo que yo me siento más aliviado y puedo disfrutar sin miedo a lo que me van a decir luego. Pero en el entorno también hay que destacar el comportamiento de los padres que tengo. Van a todos los partidos, me llevan a cada entreno y, me ayudan, a poder estar bien en todo momento. Yo diría que son la pieza fundamental, porque al acabar cada partido, cada entreno o si llegan comentarios malos sobre mí de algunos padres son ellos los que se encargan de que todo vaya bien. "
"Una cosa si tengo clara y es que no soy el mejor jugador del equipo, quizás no sepa ni dar un pase, pro me muero de ganas por ir a cada entreno, a cada partido… Disfruto mucho jugando y noto que mis compañeros también lo hacen. ¡Qué llegue ya el domingo!"
Un ejemplo muy general de un comentario positivo que muchos demandaban. Espero que esto se cumpla con bastante asiduidad y sirva como ejemplo de cómo se deben hacer las cosas.