Título en preferente para el filial

Título en preferente para el filial.

Tenerife Aficionado, en la 83-84 y Tenerife B, en la 04-05, son los antecedentes de un título en la Regional Preferente de los filiales blanquiazules, con la diferencia de que en esas dos ocasiones fue el primero en la escala de la base y en este lo consiguió el segundo, el Tenerife C.

  • Desde su reaparición en la competición lleva una racha imparable, a campeonato por año, aunque en este no puede culminar en ascenso al tener al B en Tercera, dejando esa posibilidad para el segundo clasificado, Atlético Victoria.

En esta inesperada conclusión liguera a causa de la paralización de la actividad competitiva, consiguió superar a plantillas mucho más veteranas, experimentadas y curtidas en el mundo del balompié. Imponiendo al final sus cualidades y su juventud a la experiencia de los demás. Escuadras contrastadas como; Atlético Victoria, Las Zocas, Icodense, San Lorenzo o Águilas, no pudieron seguir el ritmo de los de Chema Izquierdo.

Destacaron por su solidez en defensa, los segundos menos goleados de la regional preferente con solo diecinueve encajados, a lo que le añadió desborde y definición en la zona de finalización, sus 60 goles así lo atestiguan, convirtiéndolos en los segundos máximos realizadores.

  • Estos dos argumentos fueron las bases para obtener esa privilegiada posición y darle a este filial su primer título liguero en esta categoría, en la que consiguió ocupar en algunas jornadas el primer puesto antes de la finalización, circunstancia que no era nueva ya que en la anterior etapa competitiva de este equipo, temporada 08-09, con Juan Domingo Delgado “Merkel” en el banquillo, ya lo habían logrado.

La primera vez que salió a competir fue en la 02-03, obteniendo el título de campeón de su grupo de segunda regional, lo que le sirvió para dar el salto a primera. Una vez llegado ahí afrontaron un nuevo reto, el de subir otro peldaño, algo que se cumplió al segundo intento, esta vez a preferente, allá por la 04-05, después de haber superado un play off al que le condujo su tercer lugar en la liga regular, anteriormente había caído en esa fase en su primer año en la misma.

Luego transcurrieron seis campañas consecutivas en esa categoría con lugares destacados como el quinto puesto de la 08-09, la misma en la que se colocó en primer lugar durante algunas jornadas. Hasta que se llegó al fatídico desenlace de la desaparición en la 10-11. La situación económica, al caer el primer equipo a la segunda b, no hacían viable mantenerlo.

Su retorno competitivo se produjo en la 17-18, el primer equipo ya estaba de vuelta a segunda desde hacía unas campañas y se había consolidado en la misma, lo que dio tranquilidad económica a la entidad y  que propició la vuelta del Tenerife C, partiendo nuevamente desde la segunda regional, hasta llegar a la situación actual de este grupo, dentro de la cadena de filiales del CD Tenerife, compitiendo en la regional preferente. Sin olvidar otra de las premisas de la base de cualquier club, la formación de futbolistas que nutran a los que están compitiendo por encima de ellos.

El plantel estuvo compuesto por un bloque de jugadores, en su inmensa mayoría de primer año regional y que fueron la base del juvenil que logró el título de campeón de división de honor llevado por Cristo Marrero, con el añadido de alguno que permanece de temporadas anteriores y algún fichaje de otros equipos de las islas. A eso hay que sumarle la presencia de los juveniles que fueron aportando su granito de arena, destacando el caso de Iván que disputó casi toda la competición con ellos.

  • Todo esto a los mandos de Chema Izquierdo y su segundo, Fran Sabina, contando con la inestimable ayuda del delegado, Juan Antonio Morales, fisios, utilleros y demás personal del club, contribuyendo cada uno en su faceta dentro del organigrama a este logro.

Pedro Pérez Camacho,
ElDeportivo.es