Completada la División de Honor Juvenil 22-23

La reducción de la categoría de dieciocho a dieciséis equipos, provocó que al finalizar la 21-22 se produjeran seis descensos, por solo cuatro ascensos para completar la 22-23, en la división de honor juvenil. Los cuatro nuevos conjuntos de la categoría son; la UD Ibarra y el CD Puerto Cruz por la provincia de Tenerife y el CD Las Longueras y la UD San Fernando, por parte de la de Las Palmas.

De la doble final, tras los enfrentamientos entre los mejores de los dos grupos de la juvenil provincial tinerfeña, vuelve el norte de Tenerife a tener representación con el ascenso de los de El Peñón, que doblegaron al Ofra haciendo valer el valor doble de los goles en campo contrario. Empate a dos en campo de los verdiblancos e igualada a uno en el de los portuenses. Antes los jugadores de Fabián Fumero habían doblegado a la SD Tenisca. Y los de David Rodríguez al Llamoro. La última vez que el norte tuvo un equipo en división de honor fue en la 18-19, con los realejeros del Longuera Toscal. Mientras que el Puerto Cruz no la misma desde la 13-14.

Por su parte el Ibarra hizo bueno el empate a cero que llevaba al Villa Isabel de la ida ante el Longuera, venciendo en la vuelta por la mínima en el sur de Tenerife al conjunto realejero, lo que le sirvió a los de Emilio Pérez, para retornar a la máxima categoría del fútbol base, después de haber estado fuera desde la 14-15. En el cruce anterior se había deshecho del Santa Úrsula. Permitiendo de esta forma que el sur de la isla mantenga su presencia en la misma, ya que en la recién finalizada 21-22, los tres representantes de esa zona, Marino, Las Zocas y Águilas, habían descendido.

En la provincia de Las Palmas el desarrollo de la competición fue diferente y en base a una liga juvenil interinsular, los dos primeros clasificados que podían subir fueron los que lo hicieron. 

El primero en conseguirlo fue el CD Longueras de Telde, que debutará en esta categoría la próxima temporada. Más tarde lo hizo la UD San Fernando, en lo que será su retorno a la misma después de haber descendido en la 20-21, estando fuera una sola campaña y volviéndose a encontrar con el otro conjunto de la localidad, el Maspalomas. Ambos ocuparon la segunda y tercera posición en la tabla respectivamente, por detrás de Las Palmas b, que por su condición de filial no podía hacerlo.

Hito histórico para el conjunto teldense de la mano de su míster, Kevin Morales, en lo que significará el debut en el máximo nivel del fútbol base canario. Tomando el relevo en el municipio de la UD Telde, que hace cinco años consumó su descenso y no ha vuelto a competir en la misma. Su victoria ante el Gran Tarajal por cero goles a dos, posibilitó el éxito a falta de tres encuentros para la conclusión del campeonato, en lo que viene a ser la culminación de tres campañas de ensueño, ascendiendo un peldaño en cada una de ellas.

Por su parte al San Fernando le costó un poco más, pero su racha de ocho jornadas consecutivas sin perder le ayudó para el retorno, logró que consiguió con el triunfo ante el Acodetti B, por un gol a cuatro, en la última fecha de la juvenil interinsular. Bajo la batuta de José Carlos Álamo, otrora míster de equipos como el Castillo CF, con el que llegó a entrenar en segunda b.

En la 22-23, salvo El Hierro y La Gomera, el resto de las islas contarán con al menos un equipo que las representará, siendo la provincia de Las Palmas la que más conjunto tendrá con un total de nueve, por siete de la tinerfeña.

Pedro Pérez